Ciudad de 30 minutos y manzanas cuidadoras: la Propuesta de Bogotá en Katowice Polonia

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Ciudad de 30 minutos y manzanas cuidadoras: la Propuesta de Bogotá en Katowice Polonia

Ciudad de 30 minutos y manzanas cuidadoras: la Propuesta de Bogotá en Katowice Polonia

 

En el desarrollo del Foro Urbano Mundial llevado a cabo en Katowice Polonia en junio de 2022, la alcaldesa de Bogotá, invitada a este certamen, presenta en el espacio “Ciudades solidarias: remodelar las áreas urbanas en torno al cuidado”, los avances que sobre su programa de gobierno a podido llevar a cabo, como son, Bogotá Ciudad de 30 minutos, incorporado en el POT y las manzanas cuidadoras como ayuda a las mujeres que cuidan de sus hijos, de sus padres mayores de edad o de discapacitados.

En Bogotá, el 52 % de la población son mujeres de los cuales, cerca de 3,6 millones hacen trabajos de cuidados, teniendo en cuenta que 1,2 millones lo hace a tiempo completo y sin remuneración y reconocimiento, lo que quiere decir que un 30% de la vida de estas mujeres de la capital colombiana gira exclusivamente en torno a cuidar, según los datos que se desprenden de un estudio realizado por la Alcaldía de la capital colombiana.

Como en casi todo el mundo, en Colombia, existe esa expresión de "mi mamá no hace nada, ella todo el día está en la casa", frase que pone de manifiesto la necesidad de hacer visibles estas tareas que están totalmente “invisibilizadas”, aunque son el soporte de la vida y la sociedad a nivel mundial.

Esta afirmación, aún común, contrasta con la realidad, puesto que todas las personas hemos sido cuidadas, cuidamos y podemos requerir cuidados nuevamente de forma temporal o permanente en algún momento de nuestra vida.

Reconocer la importancia de los cuidados, repartir este trabajo de forma más equitativa y reducir la carga que supone para las mujeres son los objetivos del Sistema de Cuidado de Bogotá, el primero de América Latina que aborda esta problemática desde la política pública local.

"Si el trabajo del cuidado no remunerado fuera remunerado equivaldría al 13 % del Producto Interno Bruto de Bogotá y al 20 % del PIB de Colombia", subraya la agencia EFE en estudios que ha realizado por todo Latinoamérica.

Una de las innovaciones del Sistema Distrital de Cuidado, como se denomina oficialmente, es la creación de manzanas del cuidado que concentran servicios de educación o salud con espacios públicos y de comercialización de emprendimientos de mujeres. La forma en la que las mujeres transitan la ciudad es completamente diferente a la de los hombres, pues añade: "Los viajes de los hombres son lineales, de la casa al trabajo, las mujeres nos movemos en estrella porque vamos al jardín, al centro de cuidados para mayores, a recoger los medicamentos, etc.".

"El sistema de cuidado es una apuesta de urbanismo feminista, porque (...) decidimos reorganizar la ciudad en torno a las mujeres y las necesidades de cuidado", destaca Claudia López, el plan quiere convertir a Bogotá en "una ciudad de 30 minutos, una ciudad que se pueda caminar, una ciudad que tenga los servicios de cuidados cercanos".

Que las mujeres puedan culminar el bachillerato, hacer yoga o aprender algún oficio son algunas de las actividades que las cuidadoras pueden desarrollar en las manzanas del cuidado. Mientras ellas están en un rato de esparcimiento o aprendizaje, quienes requieren apoyos tienen espacios donde son atendidos con calidad.

Otra de las acciones que se implementan en el marco de esta política pública es la "Escuela de cuidado para hombres", una original forma de sensibilizar sobre la importancia y la carga que suponen las tareas domésticas, puesto que parte del problema es que no reconoces esa actividad con un nombre, lo das por sentado.

¿Pero que son las Manzanas del Cuidado? son una de las formas en las que opera el Sistema Distrital de Cuidado en territorio. Son áreas que concentran servicios de cuidado, nuevos y existentes, con un criterio de proximidad que permite que las personas puedan acceder a ellos sin tener que caminar más de 20 minutos.

Su objetivo es empaquetar servicios de forma próxima a las casas de las personas que cuidan y de las que requieren cuidados, y prestarlos de forma simultánea: mientras quien cuida accede a formación o respiro, quien requiere cuidado está en espacios de bienestar y desarrollo de capacidades.

Además, las Manzanas son una nueva forma de ordenamiento territorial en Bogotá, que pone en el centro de la planeación urbana las necesidades de las cuidadoras, hoy existen 10, alcanzando durante el 2021, el Sistema de Cuidado, a través de las Manzanas de Cuidado, 53.178 atenciones, de las cuales 10.416 fueron dirigidas a las personas que tienen a cargo las mujeres cuidadoras.

Así mismo, en “A cuidar se aprende y Cuidamos a las que nos cuidan”, programa de las Manzanas de Cuidado, 3.426 personas participaron en 303 talleres, en los que tomaron parte mujeres afrodescendientes, raizales, palenqueras, e indígenas, hombres y mujeres trans, adolescentes y hombres mayores. En la “Escuela Hombres al Cuidado”, 1.255 hombres se vincularon a los diferentes talleres de esta estrategia en 2021.

En las Manzanas del Cuidado, 1.875 mujeres tuvieron la oportunidad de formarse en herramientas ofimáticas gracias a la alianza que se tiene con el SENA, que también las prepara con otros cursos de formación en el marco de la estrategia 'Cuidado a cuidadoras'. Así mismo, 2.255 mujeres se formaron con cursos que les ha permitido adquirir herramientas para el trabajo.

Con la operación de las dos Unidades Móviles en las zonas rurales de Usme, Sumapaz, Suba y Ciudad Bolívar, se realizaron 3.254 atenciones, 2021 también fue un año en donde muchas mujeres pudieron dar continuidad a sus estudios logrando así su grado de bachiller después de mucho tiempo sin haber tenido la oportunidad de terminarlo. El Distrito graduó a 88 cuidadoras que culminaron su bachillerato gracias a los servicios de formación de las Manzanas de Cuidado.

La meta es disponer de 45 manzanas cuidadoras a lo largo de Bogotá, donde las mujeres cuidadoras y las personas que ellas cuidan encuentren servicios de formación y descanso que mejoren su calidad de vida, y salgan de la pobreza, que hasta hoy los cuidados está ocasionando en muchos hogares.

Trabajar para un reparto más equitativo de las tareas de cuidado entre varones y mujeres, así como entre familias, Estado y mercado, es el objetivo de la construcción de estos sistemas en la región, que hará que las familias puedan salir adelante educándose, cuidándose entre sí, y generando espacios de ocio para todos ellos.

 

 


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