DE LA RESPONSABILIDAD ÉTICA Y SOCIAL DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

DE LA RESPONSABILIDAD ÉTICA Y SOCIAL DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

DE LA RESPONSABILIDAD ÉTICA Y SOCIAL DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

 

Por:  LIDYA MABEL CASTILLO SANABRIA Abogada de la Universidad de la Sabana (Colombia), Antropóloga Urbana de la URV (España).

“Los medios de comunicación social son indispensables para la convivencia humana. Cada vez más necesitamos de ellos para comprender nuestra realidad”

Desgraciadamente, también cada vez son menos fiables. Las críticas a ellos no vienen sólo de los espectadores o lectores, también se gestan en el interior de los mismos por comunicadores que se sienten defraudados.

La ética de la información es la respuesta natural a la creciente falta de credibilidad. Si partimos de la idea de que comunicar es compartir dones, es buscar y dar sentido a las cosas a través del lenguaje, es entender y valorar al otro, es descubrir las maravillas que se encuentran en todo misterio, ¿cuáles son los valores que debemos como comunicadores hacer presentes en el trabajo periodístico?

Estos últimos veinte días han sido para Colombia un tanto preocupantes, de mucha incertidumbre y  por supuesto de mucha desinformación por parte de algunos medios de comunicación. En días pasados, pude ver el video realizado por Fidel Cano Director del periódico El Espectador donde de manera valiente, señala “nos apresuramos”, y durante cuatro minutos señala aquellas publicaciones en las cuales se cometieron errores y cual debió ser el contexto en el cual debió escribirse las notas de prensa.

Sin embargo de encontrarnos con un episodio donde el periodista se responsabiliza de sus actos, no es menos cierto que las noticias se volvieron virales y en menos de veinticuatro horas ya había dado la vuelta al mundo con el impacto social, personal, familiar y como país le corresponde a todos y a cada uno de los involucrados en los sucesos que se estaban relatando.

La verdad, aunque actualmente estoy fuera del país, puedo ver la realidad de mi país con otros ojos, y sin embargo, no puedo entender como los profesionales del periodismo por dar una primicia, por ser el número uno, generan sin ningún tipo de investigación sucesos, con lo que es peor en el proceso  de publicación dar por hecho o generar juicios de valor y sentencias cuando en muchos casos los hechos están siendo analizados por los actores judiciales pertinentes.

Hoy quisiera en este escrito dejar en claro la responsabilidad que el código deontológico del periodista ha generado para estos profesionales tanto del medio escrito, radial televisivo y para aquellos que lo ejercen desde las TIC´s. El código deontológico del periodista es un documento que recopila los fundamentos generales que regulan el comportamiento de los informadores. El contenido de este código tiene como objetivo mejorar el tratamiento informativo de algunas de las cuestiones sociales de mayor actualidad. Las recomendaciones que desarrolla en su interior deben ser puestas en práctica no solo por los profesionales de los medios, sino paralelamente, por los estudiantes de comunicación que serán los que ocupen dichos puestos el día de mañana. De este modo, los pupilos deben asimilarlos como eficientes y útiles, especialmente porque en el mundo laboral del periodismo no tiene cabida el informador que no respete el código deontológico, que engloba lo siguiente:

• El respeto a la verdad
• Estar abierto a la investigación de los hechos
• Perseguir la objetividad aunque se sepa inaccesible
• Contrastar los datos con cuantas fuentes periodísticas sean precisas
• Diferenciar con claridad entre información y opinión
• Enfrentar, cuando existan, las versiones sobre un hecho
• Respeto a la presunción de inocencia
• Rectificación de las informaciones erróneas

Los últimos acontecimientos vividos hoy en día en nuestra sociedad, han influido a la hora de establecer ciertas modificaciones y especificaciones en el código deontológico. El terrorismo, las catástrofes naturales o la violencia doméstica, hechos frecuentemente reseñados en las noticias en la actualidad, han propiciado la aparición de recomendaciones, manifiestos y códigos éticos del periodismo referidos esta vez a aspectos y temas informativos mucho más concretos. Aquí no se incide tanto en las normas éticas (para lo que ya están otros códigos y que ya se dan por conocidas), sino en aspectos más específicos y concretos del mismo y también en nuevos tópicos y retos sociales.

Al final lo que debemos buscar como lectores, televidentes, o radioescuhas  es, primero que los periodistas hagan un relato comprensivo y real de los acontecimientos diarios con contexto y sentido, que sirvan de foro para el intercambio de comentarios y críticas, proyectar la visión de la realidad de los grupos relevantes en la sociedad., presentar y explicar las metas y valores de la sociedad.

Uno de los puntales fundamentales de la democracia es la libertad de información y expresión, pero se han visto casos en los que los medios de comunicación han sido utilizados para adquirir fácilmente reconocimiento, prestigio y obtener fines personales manipulando situaciones que no aportan en nada al bien común y al desarrollo de la sociedad. El objetivo de los medios de comunicación debe ser el promover principios, valores y la ética, aquella que en este momento en que vive el mundo, para muchos y se demuestra en su actuar.

Debemos analizar de manera concienzuda qué nos presentan los medios pues son el reflejo de la realidad del país, qué somos, donde estamos y hacia dónde vamos. Los periodistas intentan muchas veces sin éxito informar e investigar lo que está a su alcance, pero si hay intereses particulares, un gran porcentaje de la verdad, puede quedar oculto.

Los medios de comunicación deben ser socialmente responsables, incluso en los contenidos pues van directamente relacionados con el impacto que pueden tener en la comunidad, es por ello que estos contenidos deben fomentar el aprendizaje, el buen vivir, la solidaridad, el respeto, las buenas costumbres, y no como lo vemos ahora el odio, la venganza, el vandalismos etc. Que logren crear conciencia sobre el respeto a los derechos y la opinión de los demás, a un verdadero desarrollo sostenible y a todo aquello que nos ayude a vivir en paz y a construir un futuro promisorio.

Es primordial defender la libertad de expresión, información y crítica. En ningún caso se puede permitir ejercer presión sobre los medios de comunicación, pero también se debe incrementar el sentido de responsabilidad en la investigación periodística pues existen deberes en el cuidado de lo que se publica, se registra y la forma de hacerlo.

Hoy por hoy somos testigos de la gran decadencia en la que han caído muchos medios por la carrera del “raiting” y las ganancias económicas, sin pensar en la comunidad y el aporte que sus contenidos deben ofrecer a los ciudadanos. Exijamos mayor investigación y menos amarillismo, y todo por ser el “número uno”, no necesitamos más rectificaciones de noticias, sino exigimos la noticia verdad y actual al momento.

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