Los desafíos de la extradición en Colombia

Penal

Los desafíos de la extradición en Colombia

Los desafíos de la extradición en Colombia

Colombia enfrenta un complejo panorama en su sistema de extradición, marcado por la variabilidad de tratados internacionales y desafíos en la protección de derechos. Se requieren reformas urgentes para garantizar que se respeten las garantías legales de los extraditados.

Bogotá, octubre de 2024. La extradición, una herramienta crucial en la lucha contra la criminalidad internacional, se encuentra en el centro del debate en Colombia. Se calcula que alrededor de 300 personas son extraditadas cada año. Este proceso en el país está regulado por los artículos 490 a 514 del Código de Procedimiento Penal. Sin embargo, la aplicación de estas normas puede variar según los tratados internacionales vigentes con los países solicitantes.

El narcotráfico ha dominado históricamente los casos de extradición en Colombia, con figuras como Carlos Enrique Lehder, Fabio Ochoa y Salvatore Mancuso. Recientemente, se ha visto la extradición de John Freddy Zapata, alias Messi, por su colaboración con la DEA, y Jhonatan Andrés Samboní Ruiz, alias Tyson, implicado en el tráfico de cocaína durante la pandemia del COVID-19. Sin embargo, la extradición también abarca delitos no relacionados con las drogas, como el del empresario Carlos Mattos, extraditado desde España en 2021 por corrupción, y la diseñadora Nancy González, extraditada a Estados Unidos en 2022 por tráfico ilegal de especies silvestres.

“Aunque la extradición se percibe comúnmente en el contexto del narcotráfico, el proceso puede involucrar una amplia gama de delitos, desde injurias hasta delitos financieros internacionales. En Colombia, el proceso de extradición se considera mayormente administrativo y se limita a verificar el cumplimiento de ciertos requisitos. Sin embargo, esta simplificación puede comprometer las garantías legales de los individuos afectados.” afirmó Jacques Simhon, Socio de CMS Rodríguez-Azuero, quien dirige la práctica de derecho penal corporativo.

Cuando Colombia no posee un tratado específico con un país solicitante, como es el caso con Estados Unidos, se aplican las disposiciones del Código de Procedimiento Penal. En contraste, con países como Reino Unido, España y Bélgica, se siguen los términos de los tratados internacionales respectivos. Esta variabilidad en la aplicación introduce una complejidad adicional en los procedimientos de extradición.

“El sistema actual de extradición en Colombia enfrenta varios desafíos. Aunque el proceso es esencialmente administrativo, se han señalado deficiencias en la protección de los derechos de los extraditados. La falta de seguimiento después de la extradición y la ausencia de mecanismos para garantizar el respeto a los derechos fundamentales en el país receptor han sido temas de preocupación.” añadió Simhon.

Para abordar estos problemas, se recomienda una revisión más exhaustiva por parte de la Corte Suprema de Justicia en sus pronunciamientos sobre extradiciones. Es esencial que el análisis no se limite a una simple verificación de requisitos, sino que considere aspectos cruciales como las penas potenciales y las garantías de derechos humanos. Además, se sugiere suspender las extradiciones hacia países que no cumplan con las garantías estipuladas en los tratados internacionales.

A pesar de la importancia del proceso de extradición, actualmente no se observa un interés significativo por parte de los legisladores para reformar el marco normativo. La falta de propuestas de ley y de impulso político podría limitar la evolución del sistema en los próximos años.

La extradición sigue siendo una herramienta vital en la cooperación internacional contra el crimen. No obstante, para garantizar que se respeten plenamente los derechos y las garantías legales, es crucial abordar los desafíos actuales y considerar reformas que fortalezcan el sistema.


Compartir

Comentarios


Artículo sin comentarios

Escribe un comentario